Ikram Gacem , una joven inglesa de 18 años, empezó a atribuir sus constantes bostezos al agotamiento que le generaba estudiar para sus exámenes en la universidad; sin embargo, notó que algo no estaba bien con ella cuando vio que ninguno de sus compañeros parecía igual de afectado.
Casi tres años después de enterarse de lo que padecía, Ikram Gacem lleva ya dos de ellos libre de este cáncer, por lo que ahora insta a los jóvenes y estudiantes a escuchar sus cuerpos y no dudar en llamar a su médico si es que notan que algo no va bien. Simplemente, pensamos que estamos cansados ??por los exámenes, pero si es inusual, échale un vistazo ?, recomendó.